Porque el mundo debe erradicar el nazismo, caso familia Krasnov

 

Lo primero que debemos saber, que nuestro deber como seres humanos es combatir el nazismo este donde este, si no, algún día tocara nuestras puertas de nuestras casas, lo peor que conoció la humanidad es el nazismo, genocidios y violaciones de derechos humanos nunca antes vistas en la historia de la humanidad, campos de concentración, hambruna y cámaras de gases para asesinar, es una de las cosas que la humanidad nunca debe olvidar.

El nazismo es transmitido de generación en generación como aconteció en el caso de la familia Krasnov.

Piotr Krasnov 

Comenzando con una oscura historia en Rusia de El abuelo de Miguel Krassnoff, Piotr Krasnov, fue un criminal de guerra que dirigió a los Cosacos del Don, en Ucrania, siendo responsable de numerosas matanzas en contra de los habitantes judíos de esas zonas.

Él , Piotr Krasnov es un ex general zarista, de la clase terrateniente. Krasnov es un monárquico, es decir, que quiere restaurar el poder de los zares y los nobles.

En octubre del año 1917 cuando los obreros de Petrogrado establecieron su poder soviético, estableciendo así un ejemplo para los obreros de toda Rusia y de todo el mundo, Krasnov dirigió a los cosacos a quienes había engañado contra Petrogrado ,krasnov habia asesinado cuanto persona se le atraviesan en su camino. Pensaba en ese momento tomar el poder, pero, cambio bruscamente, fue detenido por los obreros de Petrogrado. Krasnov dio su palabra a Leon Trotsky de no volver a luchar contra el poder de los obreros y campesinos. Leon Trotsky perdono sabiendo que era un asesino despiado, lo dejo ir. Pero deshonrosamente. Sin vacilar  faltó a su palabra y levantó una sublevación en el Don contra el poder soviético , Leon Trotsky le habia perdonado la vida, ahora, los Ríos de sangre de nuestros hermanos han fluido a causa de Piotr Krasnov.

Piotr Nikoláyevich Krasnov ( 22 de septiembre  de 1869 - 16 de enero de 1947) fue un atamán cosaco, teniente-general (desde el 1917) del Ejército Imperial Ruso. Pertenece a la familia Krasnov, antigua y tradicional dinastía cosaca que tiene sus orígenes desde la formación misma del Estado de Rusia en el siglo xiv.

Como uno de los líderes cosacos del Don y del norte del Cáucaso, fue ascendido a teniente-general del ejército ruso cuando estalló la revolución de 1917, posteriormente fue uno de los líderes del movimiento blanco contrarrevolucionario y colaboracionista nazi que movilizó a las fuerzas cosacas en la 1.ª División de Caballería Cosaca para luchar contra la Unión Soviética durante la Segunda Guerra Mundial.

Cuando los nazis comenzaron con la invasión de la Unión Soviética, Krasnov, que había tomado el camino del exilio luego de la derrota del Ejército Blanco contra los bolcheviques, ya llevaba veinte años en el exilio escribiendo obras literarias, traducidas posteriormente a 20 idiomas. En 1941, cuando Alemania invadió a la Unión Soviética, Krasnov percibió en esto una posibilidad secuencial y lógica de participar en la lucha contra el viejo enemigo – el comunismo. Para ese entonces ya era un hombre viejo, un anciano, pero esto no le impidió volver a la lucha. En el momento de su rendición ante las fuerzas británicas, Krasnov cumplió 77 años. Sin embargo, entregó su reputación al movimiento cosaco, preocupado por el destino de numerosos representantes de la comunidad cosaca en el exilio en los tiempos de postguerra - civiles, militares, hombres y mujeres, ancianos y niños. P.N.Krasnov se unió al Ejército de Dománov aproximadamente un mes antes de su rendición. Al parecer, Krasnov negoció con los ingleses que se rendirían con una sola condición: no ser entregados a los soviéticos. Los británicos incumplieron su promesa, cumpliendo los pactos secretos de Yalta entre Churchill y Stalin.

Poco tiempo después de ser entregados a las autoridades soviéticas por los ingleses, Piotr Krasnov junto con Andréi Shkuró y otros atamanes cosacos, fueron enjuiciados por traición a la patria y colaboración con el enemigo, siendo condenado por la comisión militar del Tribunal Supremo de la URSS a la pena de muerte y ejecutado por ahorcamiento en la cárcel de Lefórtovo, en enero del 1947.

Padre de Miguel Krassnoff

Semión Nikolayevich Krasnov (Krasnopolye, Óblast del Voisko del Don, 13 de marzo de 1893—Moscú, 16 de enero de 1947) fue un militar ruso y cosaco del Don.

Biografía

Formó parte de la famosa familia cosaca Krasnov, siendo hijo del atamán cosaco Piotr Krasnov.​ En 1913 egresó de la Escuela de Caballería Nikolaev e integró el Regimiento Cosaco de la Guardia Imperial, en cuyas filas combatió en la Primera Guerra Mundial. Tras la guerra, ascendió al rango de comandante asistente del regimiento personal del general Piotr Wrangel.

Después de la Revolución de octubre de 1917 regresó a Don y fue coronel del Ejército del Don, participando en la Primera Campaña del Kubán. Desde 1921 estuvo en el exilio en Yugoslavia y en Francia. Con el estallido de la Segunda Guerra Mundial, colaboró con el Tercer Reich. Desde 1941 fungió como Jefe de la 2.ª División de la Oficina de Emigración Rusa en Francia.

En 1942 llegó a Berlín y fue enviado al Don para gestionar la formación de unidades colaboracionistas cosacas para luchar contra la Unión Soviética durante la Segunda Guerra Mundial. Luchó bajo las órdenes de Helmuth von Pannwitz y fue condecorado en tres ocasiones.​ El 5 de mayo de 1944, Semión Krasnov, ya fungiendo como jefe de personal de la Dirección Principal de las Fuerzas Cosacas del Ministerio del Reich para los Territorios Ocupados del Este, fue ascendido a Mayor General de la Wehrmacht y nombrado jefe de la Dirección Principal de las Tropas Cosacas de la Administración de Aviación de Moscú. ​ En su calidad de Mayor General, mandó las tropas que fueron destinadas al frente de Italia. ​ Durante la guerra fue un estrecho colaborador de su padre Piotr Krasnov.

En mayo de 1945, ante la inminente derrota alemana, se entregó a los británicos en la ciudad de Lienz (Austria) junto con 2400 oficiales cosacos, y fue extraditado a la Unión Soviética. Fue transportado a Moscú, donde fue detenido en la Prisión de Butyrka. Krasnov, junto con otros oficiales, fue juzgado y condenado a muerte, siendo ahorcado en Moscú el 16 de enero de 1947 junto a su padre Piotr Krasnov.

Miguel Krassnoff Marchenko

Nacido como Mikhail Semyónovich Krasnov, es hijo de Semión Krasnov, cosaco del Don, y Dhyna Marchenko, cosaca de Kubán, y nieto de Piotr Nikolaevich Krasnov, general y atamán de los cosacos del Don, nació en Austria al año siguiente de terminada la Segunda Guerra Mundial. Finalizada la guerra, padre y abuelo fueron apresados por los británicos en Lienz por su colaboracionismo con las fuerzas de la Wehrmacht y entregados a los soviéticos —junto a miles de civiles y oficiales cosacos que terminaron en campos de concentración y trabajos forzados como el Gulag o ejecutados ("La traición de Lienz")—. Fueron condenados a muerte en el marco de los procesos que llevaron a cabo los vencedores soviéticos, y ejecutados en 1947 en Moscú.

Dhyna Marchenko, junto con su hijo recién nacido y su madre María Chipanoff, lograron emigrar a Sudamérica con el apoyo de oficiales británicos y estadounidenses y la ayuda de un diplomático chileno. El 19 de agosto de 1948, junto con otros refugiados provenientes de distintos países, llegaron a bordo del barco Mercy al puerto de Valparaíso y de allí fueron trasladados a Santiago, al Estadio Nacional, donde fueron alojados en sección de camarines o carpas. El primer hogar de los Krassnoff en la capital chilena consistía en dos piezas con un baño, arrendados en una pensión de la avenida Brasil. La madre de Krassnoff trabajó como traductora e intérprete en el Ministerio de Relaciones Exteriores

Miguel Krassnoff Martchenko (Tirol, Austria; 15 de febrero de 1946) alias “El Ruso” es un exmilitar chileno condenado por crímenes de lesa humanidad. Brigadier del Ejército de Chile, participó en el asalto a la casa presidencial de Tomás Moronota ​ durante el golpe de Estado de 1973 que derrocó al presidente Salvador Allende y, posteriormente, en diversas misiones, como miembro designado de la policía secreta Dirección de Inteligencia Nacional (DINA) de la dictadura militar de Augusto Pinochet (1973-1990).

Por las anteriores causas fue acusado y condenado en numerosos casos de violación de los derechos humanos, específicamente de secuestro, tortura y desaparición de personas, ocurridos principalmente entre 1974 y 1976. Krassnoff es uno de los militares con más condenas en Chile, totalizando más de 25 ratificadas por la Corte Suprema de Chile, y que sumaban, a mayo de 2023 más de 1000 años de cárcel.

El coronel Miguel Krassnoff Bassa (hijo)

En 2018 se viralizó en redes sociales un video en el que el hijo del Brigadier Miguel Krassnoff Martchenko, coronel del Ejército de Chile Miguel Krassnoff Bassa, agradecía la solidaridad del Ejército con su padre durante una actividad deportiva realizada el 1 de diciembre. 6. Octubre en las instalaciones de la Escuela Militar.

El coronel Miguel Krassnoff Bassa afirmó que “quiero agradecer profundamente su cariño, lealtad y masculinidad al poder recordar a soldados que no todos recuerdan... nos importa que nuestros padres, que dieron su vida por Chile y su familias, están en el corazón de todos vosotros".

El problema es que Krassnoff Martchenko, de 75 años, se encuentra en Punta Peuco condenado a más de 1.000 años de prisión por violar los derechos humanos durante la dictadura, y está vinculado a más de 90 casos.

Actualmente cumple su condena en una lujosa prisión de Punta Peuco construida para los mayores asesinos torturados que Chile ha tenido la desgracia de tener.

Este es un claro ejemplo de que si hoy el mundo no destruye al nazismo de raíz, como Rusia lucha cada día en Ucrania, los genocidas pasan de generación en generación expandiéndose por el mundo, la lección que nos queda es que ante el rostro de un cruel asesino nazi, no se le debe dar perdón, porque cuántos miles de muertes se habrían evitado si León Trotsky hubiera sido tan cobarde que no se atrevió a arrestar a Pietr Krasnov.

Ale Kunz R